Ayer volví a mi antiguo instituto y me encontré con dos grupos de chicos que han leído la novela. Pasamos un rato muy agradable comentando algunas de las anécdotas menos conocidas y más divertidas que rodean la redacción y la publicación de Dos muertos y pico.
Fue emocionante volver por tercer año consecutivo al instituto donde yo estudié BUP y COU desde 1978 hasta 1981. En el Olorda me siento como en casa, me trae tan buenos recuerdos...
Gracias Carme, Antonio y Toni por vuestra cálida bienvenida y por seguir confiando en la novela.
Chicos, muchícimas gracias a todos por hacerme pasar un rato inolvidable. Hasta siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario